Durante el embarazo se producen en la mujer una serie de cambios a nivel emocional, hormonal y postural. Estos cambios suceden en cada trimestre y se manifiestan, sobre todo, en la columna vertebral, la cintura escapular y la pelvis.
El método Pilates propone un programa de ejercicios y cuidados para mejorar el estado general de la futura madre y prepararla físicamente para el parto y el post-parto.
La práctica de Pilates durante y después del embarazo, es de suma importancia para el trabajo del suelo pélvico, al igual que la estabilidad de la pelvis en todos los cambios que se realizan en este periodo. Debido a la modificación del centro de gravedad que se produce en la madre, es importante trabajar el fortalecimiento de la cintura escapular y la movilización y relajación de la columna, principalmente columna lumbar, la cual se ve afectada y acortada en este proceso.
Para poder iniciar esta actividad, la madre tiene que estar en el principio del segundo trimestre, y su embarazo no puede ser de riesgo. Si la madre está realizando Pilates con anterioridad, podrá iniciar su entrenamiento de Pilates Embarazo sin esperar que finalice el primer trimestre.
OBJETIVOS GENERALES DEL PROGRAMA
- Ayudar y acompañar a la embarazada a pasar por los diferentes cambios físicos que atraviesa en este proceso.
- Proporcionar información sobre los cambios que se producen en el cuerpo en cada etapa.
- Mejorar la postura antes, durante y después del embarazo.
- Preparar el suelo pélvico para soportar el aumento de peso, para el nacimiento y la actividad sexual.
- Mantener las funciones abdominales y corregir la patología “distáis recti” (separación de los músculos rectos abdominales en la línea alba del abdomen).
- Prevenir dolores de espalda y dolor en la articulación sacro-iliaca.
- Preparar y fortalecer la parte superior del cuerpo para los cuidados del bebe, después de su nacimiento.
- Preparar a la madre para el periodo de lactancia.
- Preparación para el trabajo de parto, nacimiento y post parto.
BENEFICIOS DEL PROGRAMA
- Mejor postura durante y después del embarazo.
- Fuerza y estabilidad interna.
- Fortalecimiento del suelo pélvico.
- Prevención de lesiones y dolor lumbar.
- Prevención del típico dolor de ciática en la embarazada.
- Reducción de stress y dolor de espalda.
- Mayor conciencia de lo que ocurre en el cuerpo en este proceso.
- Mejor equilibrio y coordinación.
- Mayor conexión interna con el bebé.
- Mayor autoestima.
- Mejor estado de ánimo.
